Ryan Borgwardt, un padre de Wisconsin en Estados Unidos, fingió su muerte y desapareció durante casi tres meses, fue sentenciado a 89 días de cárcel, exactamente el mismo tiempo que estuvo ausente tras simular un accidente en el lago Green Lake.
El caso, que movilizó a autoridades locales, federales de Estados Unidos e internacionales y sumió a su familia en la incertidumbre, puso a prueba los recursos de búsqueda y la confianza familiar.
El fallo judicial, emitido el 28 de agosto de 2024, impuso la pena de prisión y obligó a Borgwardt a pagar 30 mil dólares en concepto de restitución a las fuerzas del orden, como compensación por los gastos generados durante la intensa búsqueda.
Según People, la fiscalía había solicitado una condena de 45 días, pero el juez decidió duplicarla para reflejar el impacto temporal y emocional de la desaparición. Durante la audiencia, Borgwardt expresó su arrepentimiento ante el tribunal: “Lamento profundamente las acciones que tomé esa noche y todo el dolor que causé a mi familia y amigos”, recogió el medio.
La desaparición de Borgwardt se remonta al 11 de agosto de 2024, cuando, tras un supuesto viaje en kayak por el lago Green Lake, su rastro se perdió. Durante dos semanas la familia pensó que había fallecido, hasta que las autoridades lograron encontrar su registro en frontera dos días después de su desaparición.
La policía descubrió que en enero de este año había contratado una póliza de seguro de vida por más de 300 mil dólares, que realizó transferencias de fondos a una cuenta bancaria en el extranjero y mantuvo contacto con una mujer en Uzbekistán.
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