El Banco Central de Venezuela (BCV), manejado por el régimen de Nicolás Maduro, reportó este miércoles 30 de julio un nuevo salto en la tasa oficial del dólar, que alcanzó los 124,51 bolívares, un aumento de 0,64 bolívares frente a los 123,87 del martes 29 de julio. El euro también subió, pasando de 142,73 a 142,95 bolívares.
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Comparado con hace una semana, cuando el dólar estaba en 121,34 bolívares, la devaluación del bolívar es evidente, golpeando aún más a una población asfixiada por la inflación descontrolada. Mientras el régimen celebra supuestas victorias electorales tras la farsa del 27 de julio, la economía venezolana sigue en picada.
El alza del dólar oficial, lejos de ser un simple ajuste, refleja el fracaso del chavismo en estabilizar una moneda que no para de perder valor. En un país donde los salarios son de miseria, cada incremento en la tasa del BCV significa un nuevo obstáculo para los venezolanos que luchan por sobrevivir en una economía dolarizada de facto.
La persecución del régimen contra plataformas que informaban sobre el dólar paralelo, con al menos una veintena de detenciones y el cierre de estas páginas, no ha detenido la devaluación del bolívar.
