
Este viernes 1 de agosto es el Día Internacional de la Cerveza. Más allá del tradicional brindis, esta efeméride pone en foco el universo de creatividad, técnica y pasión detrás de esta bebida.
Por infobae.com
Origen y significado del Día Internacional de la Cerveza
La celebración nació en 2007 en un pequeño bar de Santa Cruz, California, Estados Unidos. Lo que al principio fue una cita entre habitués, rápidamente se consolidó como un homenaje global.
Cada primer viernes de agosto, aficionados y profesionales de todos los continentes rinden homenaje a esta bebida milenaria al compartir experiencias, recetas y el placer de una buena cerveza. En 2025, la fecha coincide con el 1 de agosto.
El desarrollo de una receta de cerveza desafía la imaginación, el conocimiento técnico y la atención minuciosa a los detalles.
Tomás Ávalos, maestro cervecero que ganó el primer premio en la Copa Argentina de Cervezas 2023, afirmó en diálogo con Infobae: “El desafío de pensar una receta de cerveza comienza imaginando el producto final, partimos desde lo ideal e imaginamos su carácter. Desde allí comenzamos el proceso de armado de la receta donde tenemos en cuenta la columna de granos y su relación con la química del agua, el perfil de fermentación con la elección de la cepa y la curva de fermentación y sus temperaturas, también las variedades de lúpulo y técnicas de aplicación”.
Ávalos remarcó que el gran reto consiste en visualizar la cerveza como un conjunto y lograr que cada elemento se integre de forma armónica en el producto final. Este brewmaster se consagró en la mencionada competencia con la receta de Salmón Birra.
Por su parte, Ricardo Aftyka, maestro cervecero, coincidió en que el punto de partida es el estilo. “Dentro del mundo de la cerveza, los estilos definen una región y una historia”, explicó. Cada variedad, como la IPA, la Stout o la Flandes Red, cuenta con parámetros internacionales para color, grado alcohólico, carbonatación, sabor y aroma.
Así, una Stout debe ser oscura, opaca, con espuma densa, aromas a café y chocolate, y un tenor alcohólico entre 4% y 5%. “Lo primero que elijo es el estilo; en función de eso, consulto los parámetros y trabajo la receta para ajustarme a ellos”, detalló Aftyka, creador de las recetas de Juguetes Perdidos.